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Decisiones y rumores

Autor: Flor Edilma Osorio Pérez || Publicado en Septiembre 27 de 2016

Gráfica alusiva a Decisiones y rumores
Región:Nacional |

Mil ochenta y nueve historias recogió, en 1942, R. Knapp a propósito de la segunda guerra mundial. Con esta base empírica identificó tres grandes grupos de rumores:

i) los cizañeros o agresivos, los cuales buscan la discordia y atentar contra la cohesión social; son una importante mayoría pues el estudio de Knapp reveló que cerca de dos tercios de los rumores son hostiles en su intención y divisivos en su efecto.
ii) los de miedo o ansiedad, con intensidades muy diversas y puede ir desde una vaga angustia hasta el total pánico. Los de carácter alarmista inhiben la confianza de sus propios esfuerzos y pueden llevar a una perspectiva derrotista.
iii) Y los de sueños dorados o de deseo, resumen sentimientos esperados, deseados, ansiados. Fueron los menos numerosos en el estudio de Knapp. El deseo de paz llevó a rumores de un final precipitado, que quería adelantarse a los hechos. “El deseo de paz era tan grande, que el imaginario se infiltraba en la realidad y modificaba los hábitos. Los marcos de referencia se hallaban rotos y todo podía suponerse en pro de sentirse mejor, más seguro” (Centeno, 2006:108) [1].

Aquí comparto dos cortas historias con taxistas en Bogotá, en la última semana de agosto de 2016; juntas corresponden a las dos primeras categorías de Knapp, las que más me preocupan.

1. “La teoría del complot y todo por la plata”

¿Cómo van las cosas? Le pregunto al conductor. ¿El partido de futbol o el plebiscito? Me responde él, un hombre cercano a los 40 años, proponiéndome tema de conversación. Yo voy a votar por el NO me dice con convicción.
¿Y, por qué? Todo esto es una farsa y a uno lo creen idiota. Mire, vecina, los decanos de ciencias sociales de varias universidades en una reunión lo mostraron. ¿No ha escuchado? Todo empezó con una consultoría que Santos le pagó a Tony Blair, no sé si la recuerda, que fue financiado por los árabes. Blair y Clinton luego de ser presidentes se han metido en la merchandise… pero no de cualquier cosa. El lema es “yo le consigo lo que usted necesita”. Los árabes están muy interesados en el coltán un mineral que desafortunadamente – y tengo que decirlo así- desafortunadamente tenemos en abundancia en el país. La oferta que le hicieron los árabes a Santos fue de hacerlo parte del negocio -y con eso se hace multimillonario- y lo que le exigieron fue que hubiera un acuerdo de paz para que no tuvieran problemas con la guerrilla. Es por eso que surge la idea y la intención de Santos de meterla toda al acuerdo con las Farc.

Otra cosa. El papá de Francisco Santos, en la época de la violencia, cuando Laureano Gómez cerró el periódico El Tiempo, se reunió con otros y le propuso a Manuel Marulanda Gómez, que era un muchacho medio delincuente, financiarlo para que se armara en contra del gobierno de ese entonces. Yo vi ese documental claramente. Y mire en lo que se ha convertido esa propuesta, en ese monstruo que es hoy las Farc. Eso que le estoy contando está en un video y lo hemos circulado por ahí. Pero si yo le doy el link, usted luego me a decir, pero Gerardo, ese link es de pornografía. Imagínese que cuando se empezó a hacer público, lo jaquearon.

Pero además, son varios frentes, creo que ya van como catorce o quince que no van a entrar en el acuerdo. Y qué dicen las Farc? Que ya no serán parte de las Farc. Y a los que no están de acuerdo ¿qué les importa eso? Finalmente el negocio del narcotráfico que es tan rentable, no lo van a desmontar así que el problema va a seguir.
Veci, la cosa no es de estar con Santos o con Uribe. Esto es de defendernos como pueblo. Yo no soy uribista. Ese fue un presidente que le hizo mucho daño al país, con todos esos tratados de TLC. Esto es de defender lo que es nuestro, este país que es tan hermoso y con tantos recursos y que la minería lo va a destruir haciendo millonarios a muchos, incluyendo al mentiroso de Santos. Lo de la paz es una farsa, una gran mentira ¡Que no nos crean tan pendejos! Insiste él convencido, mientras yo pago la carrera y me despido.

2. “Premiar a los malos, un mal ejemplo”

¿Qué piensa del plebiscito? le pregunto al joven conductor del taxi, que no tendrá más de 25 años. Pues mire vecina, me responde sin dudarlo mucho, si yo tuviera que votar mañana, votaría por el NO.

¿Y, por qué? Pues mire, yo no he leído los acuerdos y no tengo clara la información de lo que firmó. Por eso yo le digo a usted que si tuviera que votar mañana, con lo poco que conozco y lo que he escuchado por ahí, yo votaría No. Mire usted. He escuchado que no les van a dar cárcel, después de todos los males que causaron. Y que les van a pagar como millón ochocientos mil pesos. Imagínese. Yo me gano millón cuatrocientos trabajando duro como taxista. Eso es como si sacaran a ese violador de niños, para que siga violando y además le pagaran dinero mensual. ¿Cómo va a ser eso posible? Yo no estoy de acuerdo.

Pero además a uno se le hace raro que este señor Lleras, el vicepresidente, no esté convencido de los acuerdos. Si es del gobierno, es de los mismos y no le convence la cosa, uno si piensa que algo está mal.

Claro que cuando uno piensa en la gente del campo que tanto ha sufrido con la guerra, es importante votar por el sí. Yo no he sufrido, a Dios gracias, pero conozco gente que sí le ha tocado duro. Ese sería un motivo que me haría cambiar de opinión.
Vuelvo y le digo; yo tengo que leer los acuerdos para entender mejor qué es lo que se firmó y poder votar con más información. Pero con lo que se escucha por ahí mi voto es por el no.

Los sondeos se hacen desde muchos lugares. Un taxista inquieto, le comentó a un colega que en su pesquisa llevaba veintitrés entrevistados, de los cuales, solo tres decían votar por el sí.
¡Amanecerá y veremos!
Septiembre 2 de 2016

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[1] Centeno, Matías. (2006) Radiografía del rumor en: “El rumor como fuente de información en la prensa escrita” Parte I, Cap. 1. tesis de grado para acceder a la Licenciatura en Comunicación Social. Facultad de Ciencias Humanas, Universidad Nacional de San Luis. Consultada en httpss://periodismoaplicadounsl.files.wordpress.com/2012/10/radiografia-del-rumor.pdf

Imagen: Amanda Orjuela